Las empresas, cada vez más interesadas en empleados capaces de teletrabajar
Tras más de un año de teletrabajo obligatorio a causa de la Covid-19, muchas empresas comienzan a plantear nuevas estrategias para el funcionamiento post-pandemia entre los empleados. ¿Cómo es el mundo laboral tras la pandemia?
Por Rocío González
El teletrabajo es la forma más evidente. Reuniones por Zoom, conversaciones por Teams y el home office se convirtieron en la nueva rutina. El modelo de trabajo mantenido de manera estática durante décadas ha cambiado para siempre.
La forma de trabajar aprovechando los avances tecnológicos y de teletrabajo desencadenaron un proceso de cambio configurando nuevas formas de abordar la jornada laboral. El impacto del teletrabajo en el funcionamiento de las empresas aceleró un profundo debate sobre las habilidades y los puestos de trabajo más demandados a la hora de teletrabajar.
Productivos, autónomos y concentrados son algunas de las percepciones que han aparecido en los empleados y las empresas. Trabajar desde casa aumenta la producción, autonomía y empoderamiento y una mayor concentración.
Flexibilidad, digitalización y motivación
La huella del teletrabajo está siendo positiva en la adopción de esta nueva forma de trabajar. La práctica se mantendrá en el futuro con unos niveles superiores, aunque con modelos híbridos para que el cambio sea progresivo.
Los principales sectores más demandados son los de marketing y tecnología. Existe una tendencia al smart working basado en motivación, flexibilidad y uso de las nuevas tecnologías.
El uso del software para el análisis del desempeño y la eficiencia del teletrabajo es relevante para empeñar la labor desde sus casas. La digitalización de los procesos lleva consigo una huella y actividad donde afloran nuevos rasgos de cada empleado con diferentes tipos de perfiles.
Ser digital, independiente, disciplinado, perseverante, proactivo y responsable también son clave para la adopción del trabajo desde una ubicación diferente a la presencial.
Adaptabilidad, resiliencia, capacidad analítica y organización
El perfil del teletrabajador cuenta con una serie de competencias profesionales y habilidades que deben encajar con los métodos y modelos de trabajo implantados por las diferentes organizaciones.
El trabajo en remoto requiere de unas necesidades que adopten las tareas que hagan exitosas a las empresas. Responsabilidad, resolutivo e independiente son singularidades básicas para conseguir el éxito en el trabajo.
Los escenarios que se plantean son diversos. Existen una serie de características para un buen teletrabajador que completen el perfil del profesional buscado. La adaptabilidad, la resiliencia, la capacidad analítica y la organización son algunas de las habilidades más demandadas para los nuevos candidatos.
En esta línea, se considera imprescindible para el teletrabajador la buena comunicación, ser estratega con una visión a largo plazo de la empresa y de sus proyectos destacables, un buen planificador de los tiempos estructurando las fases del trabajo, adaptación a los cambios, creativo en la generación de ideas y un gran mediador conciliador para el buen funcionamiento del equipo.
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