¿Cómo un sistema de información puede ayudar a mi negocio?
En un mundo “infoxicado” (con mucha información que puede provocarnos reacciones casi alérgicas), una pregunta importante es qué hacemos con todos esos datos que nos llegan de nuestros clientes por diferentes vías o que están ahí, a nuestro alcance, y los desperdiciamos. ¿Cómo los recopilamos, procesamos y encontramos salidas útiles? ¿Cómo logramos tener información relevante a partir de estos?
Sí, esos datos, por sí solos, no constituyen la información que necesitamos para entender qué consumen y cómo los hacen los clientes. Tampoco, qué procesos podemos mejorar para ser más eficientes y lograr las ventajas competitivas. Es ante estas dudas cuando aparecen en escena los sistemas de información para ayudarnos y quitarnos tantos dolores de cabeza.
Aunque suena un poco sofisticado el término, veámoslos como conjuntos organizados de personas, tecnología y procesos que nos ayudan a cumplir algunos pasos simples y necesarios: recopilar datos, procesarlos y darles una salida en forma de información que permita tomar decisiones y agilizar los procesos y actividades en nuestras organizaciones.
Hay varios, como los Sistemas de Información Transaccionales, los Sistemas de Información de Apoyo a la Toma de Decisiones, los Sistemas de Información Gerencial, los Sistemas de Información Ejecutiva y los Sistemas de Información Estratégica, con diversos objetivos y misiones, pero siempre, enfocados a las mejoras organizacionales.
La perspectiva que no podemos perder es que los sistemas de información son herramientas vitales para gestionar datos, tomar decisiones, aumentar la eficiencia operativa y lograr ventajas competitivas en el mercado.
Son piezas coordinadas que se alimentan de registros o parámetros aparentemente separados y que los devuelven convertidos en algo con sentido y aprovechable. Son empleados para gestionar los recursos humanos de nuestras empresas o para planificar, controlar y monitorear los procesos de producción.
Uno de los tipos más conocidos es el que corresponde al Sistema de Gestión de Clientes (CRM), que centraliza y organiza información sobre estos, sus interacciones, historial de compras y actividades de marketing para mejorar las relaciones y fomentar la fidelización. Ejemplos destacados son HubSpot, Zoho CRM, noCRM.io, Zendesk, entre otros.
También tenemos, por ejemplo, los ERP (Enterprise Resource Planning) que integran y gestionan de manera eficiente los procesos y recursos de una empresa u organización. Estos permiten contar con una plataforma única y completa para recopilar, almacenar, procesar y compartir datos e información en tiempo real. Ahí afuera están algunos populares como SAP, Oracle ERP Cloud o Microsoft Dynamics 365, con excelentes prestaciones.
Recopilar datos es importante, pero saber qué hacer con estos y que “salidas” brindar a la información son más vitales aun. Contar con buenos sistemas de información es la clave para cumplir objetivos estratégicos, crear nuevos productos, mejorar procesos, obtener ventajas competitivas o sobrevivir.
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