La prevención de riesgos laborales eficaz requiere "integración" en la empresa y profesionales adecuados
Los accidentes laborales siguen siendo un lastre en el entramado empresarial español. Coincide con esta afirmación el doctor Daniel Sánchez Gallo. El docente del Grupo CEF.- UDIMA, asegura que "se pierde competitividad por retraer recursos y dilatar plazos". Hablamos con él de cómo hacer prevención "en serio" o qué esperar de cambios en el sector con la llegada del teletrabajo y el trabajo en remoto.
Alberto Orellana
Sánchez Gallo es miembro del claustro de profesores del Máster Universitario en Prevención de Riesgos Laborales, que ofrece el Centro de Estudios Financieros a través de la Universidad UDIMA. Además de ingeniero industrial y técnico superior de prevención de riesgos laborales, es presidente de la Comisión de Seguridad y PRL del COIIM-AIIM (Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Madrid).
En su opinión, si se quieren prevenir accidentes en el ámbito laboral de forma eficaz, deben atenderse dos factores: integración y formación técnica de cada profesional. Hay que integrar la PRL "en todos los niveles jerárquicos de la empresa"; es decir, no tomarla "como un mero formalismo".
Del título que imparte destaca especialmente el aspecto de las prácticas profesionales: "Yo creo que es el mejor reclamo". Para él siempre ha sido lo que más valoraban los estudiantes, "no sólo por visualizar la realidad de lo aprendido sino porque a veces la experiencia acaba en una contratación", sostiene.
Además, cree que suele estudiarse mucho contenido abstracto, y la mente a veces "distorsiona" lo aprendido de forma diferente a la realidad. Después, cuando toca enfrentarse a ella "nos quedamos descolocados", señala; "hace falta mucha más práctica".
El profesional adecuado
De la misma forma, el también auditor y perito en PRL está convencido de que, al cursar el máster, la formación técnica previa debe coincidir con la variante escogida del posgrado. Preguntado por cuál de las tres especialidades (Seguridad, Higiene Industrial y Ergonomía y Psicosociología Aplicada) tiene más hueco en el mercado actual, dice que la psicosociología "porque con el Covid vamos a acabar todos locos".
Bromas aparte, cree que la formación de base y su progresión superior es más importante que hacer todas las opciones, a pesar de ser ese precisamente su caso. "Yo soy Ingeniero con las 3 especialidades. ¿Cres que una empresa me va a seleccionar para hacer sus evaluaciones de riesgo psicosociales porque tenga la especialidad o elegirá preferentemente a un psicólogo que tiene cinco años más que yo de conocimientos?".
En este sentido se posiciona de forma más crítica, pues en España percibe que a menudo "se va a cubrir el expediente con el mínimo coste". Las empresas seleccionan técnicos de PRL con menos salidas en lugar de especialistas de un sector concreto, "para pagarles menos aunque sus estudios no sean los más adecuados", argumenta Sánchez Gallo.
Él insiste en cursar únicamente las especialidades que vayan "en línea" con la base técnica de la carrera. Cada sector industrial tiene sus propios problemas, abunda, unos más de ergonomía, otros de seguridad, etc. Por ello las empresas "deberían ser lo suficientemente responsables para saber elegir al profesional más adecuado" en función de esa formación.
Oportunidad en remoto
Por otro lado, el docente del Grupo CEF.- UDIMA considera que la PRL se podría beneficiar del trabajo en remoto. "Hay empresas grandes que tienen muchos centros en todo el territorio español y un técnico de PRL podría visitar la máquina del atrapamiento para ayudar a hacer una investigación de accidentes, por ejemplo, con una videoconferencia donde le fueran mostrando el lugar de los hechos. Eso ahorraría gastos y desplazamientos".