El Big Data nunca sustraerá a las personas la adopción de las decisiones importantes
De izquierda a derecha, Joaquín Danvila, Roque de las Heras, Ignacio de las Heras -el ponente- y Arturo de las Heras (Redacción y fotografías: Luis Miguel Belda)
El proceso de captación y análisis global de datos en el marco del llamado Big Data es ya una tarea que compete casi por entero a las máquinas, de creciente sofisticación; sin embargo, “siempre, o casi siempre, habrá alguien, una persona, que tome una decisión”, por lo general, las decisiones importantes.
‘El Big Data como impulsor de la relación con el cliente en la empresa’ fue como tituló su conferencia el ingeniero aeronáutico Ignacio de las Heras, convocada con motivo del 40 aniversario del Centro de Estudios Financieros (CEF.-), y contexto en el que deslizó su augurio.
Ahora bien, agregó, también cada vez más será creciente la necesidad de que el analista que haya de decidir el qué, cómo, por qué y hacia dónde se forme de continuo, “porque estamos en un mundo que cambia rápidamente, y por eso se ha de ser muy flexible a la hora de captar y analizar los datos, igualmente cambiantes”.
En opinión de este gurú en el ámbito del Big Data, “la mayor parte de la información que actualmente extraen las empresas es inútil”, consecuencia de un problema que caracteriza a todas las empresas, que “es que hay millones de servidores y la gente no habla entre ella”.
Para implantar el Big Data como concepto, teórico y práctico, es necesaria una estrategia: “Lo primero, una auditoría para conocer qué datos tenemos. Luego, tener en cuenta las consideraciones legales sobre la propiedad, intimidad, uso de la identidad, etcétera; en tercer lugar, necesitamos conocer qué queremos generar con esos datos y cuál es la guía para ellos”. Como conclusión, avisó, “es más fundamental la perspectiva de negocio que la perspectiva técnica”.
Reconoció que cambiar de paradigma no siempre es fácil. “Salir del Excel cuesta mucho al principio”, pero no hay vuelta de tuerca, es una cuestión de sí o sí. “No desdeño el uso del Excel”, apuntó, “pero para ciertas aplicaciones el excel ya no vale”. Por ejemplo, citó, “cuando hay que procesar un archivo de dos gigas, el excel se queda corto”.
De las Heras llamó la atención de las empresas hacia el Big Data como “una ruta por explorar como negocio” que tiene muchas posibilidades de crecimiento en España, dado que no es precisamente hoy un país que haga un uso corriente de esta herramienta, a diferencia de países de su entorno.
Admitió que desaparecerán empleos que con la transformación digital quedarán desfasados, pero, al mismo tiempo se crearán otros nuevos. Sin embargo, reiteró, aunque las máquinas jugarán un papel inevitablemente esencial en la administración empresarial en adelante, “la persona seguirá aportando valor por delante de los ordenadores, para lo cual es necesaria la formación: El Big Data nos obligará a una continua puesta al día”, sentenció.